Historia
En 2022, en San Cristóbal de las Casas, Chiapas, el cineasta y fotógrafo Carlos Hernández sembró la primera semilla de Cacao Cantor al elaborar un pequeño lote para reconectar —junto a su familia— con la energía del cacao y los sabores que reconectaban con el origen de su abuela. Así nació esta firma, cuyo nombre honra el acto de regalar. El tambor que nos representa late con alegría y evoca el espíritu bondadoso del fruto divino y su entorno. Cacao Cantor crece con el deseo de ofrecer productos nutritivos y sinceros, creados a partir de una semilla ancestral, con respeto por la tierra y bajo principios de comercio justo. Entre caminos, tradiciones y carnavales, seguimos transformando pequeños lotes y maravillándonos con los saberes del cacao, los sabores naturales y el amor profundo a la madre tierra.
Proceso
Nuestra labor comienza con las familias productoras, guardianas de esta semilla nativa, que cultivan el cacao bajo sombra en el sur de México. Estos entornos, ricos en biodiversidad, aportan complejidad al sabor y aroma del fruto.
Con prácticas agroecológicas, cosechan y fermentan el cacao que transformamos bajo la escuela bean to bar: desde el grano hasta la barra.
Nuestra colección nace del deseo de integrar ingredientes naturales con valor culinario y tradicional.
Cuidamos cada detalle, desde la receta hasta el empaque: usamos materiales biodegradables como papel de algodón reciclado y fibras vegetales. Así, cuando sostienes una barra, llevas contigo el cierre de una historia... y el inicio de otra.
Comunidad
La alquimia de Cacao Cantor es posible gracias a la colaboración entre familias productoras, chocolateros, artistas del papel y quienes saborean cada mordida.
Creatividad, compromiso y responsabilidad se conjugan para fortalecer la economía local y promover un comercio justo y buenas prácticas en torno al cacao.
Amigos de Cacao Cantor Colaboramos con proyectos afines como el Museo Vivo del Papel, Mama Funga y Mezcal Todos Contentos. Juntos tejemos redes para que la magia del cacao llegue a más personas, de forma justa, bella y consciente.